Más de 40 personas han participado esta semana en un encuentro en la localidad portuguesa de Miranda do Douro. ¿El objetivo? Seguir reflexionando y proponer posibles nuevas rutas en torno al Duero, así como destacar el valor de la conectividad ecológica en la preservación de los territorios.

La jornada, en la que hemos participado, estaba organizada por la Asociación Ibérica de Municipios Ribereños del Duero (AIMRD), dentro del proyecto europeo OET Durius, cuyo reto es la creación de un Observatorio Ecológico Transfronterizo en torno al Duero.

Junto a la AIMRD, integran el proyecto otras siete entidades de España y Portugal. En concreto, desde España participa el equipo de nuestra área de Paisaje y Sostenibilidad, el clúster Hábitat Eficiente AEICE, el vicerrectorado de investigación y transferencia de la Universidad de Salamanca y el Ayuntamiento de Zamora.  Desde Portugal:  Palombar – Associação de Conservação da Natureza e do Património Rural; Comunidade intermunicipal Do Douro (CIM Douro) y Comunidade intermunicipal Tras Os Montes (CIM-TTM). La iniciativa entra dentro del programa europeo Interreg VI-A  España-Portugal (POCTEP) 2021-2027.

 

 

Proceso participativo en Miranda do Douro

El ayuntamiento de Miranda acogía este nuevo encuentro en el que, además, los asistentes han podido disfrutar de una visita por el centro histórico de esta ciudad de origen romano. La alcaldesa de Miranda do Douro, Helena Barril, fue la encargada de presentar la jornada, en la que participaron técnicos y profesionales del sector del turismo, aportando sus puntos de vista sobre la situación del territorio. En su intervención, la primear edil agradecía el esfuerzo y la importancia de “preservar un patrimonio natural que pertenece a toda la humanidad”. Por su parte, Gumersindo Bueno Benito, director del área de Paisaje y Sostenibilidad de la Fundación Santa María la Real, exponía los objetivos del proyecto europeo o OET Durius, que cuenta con un presupuesto de 1.573.013 euros, financiados al 75% por el programa Interreg VI-A  España-Portugal (POCTEP) 2021-2027 y que finalizará en 2026.

Tras ellos, Víctor J. Colino Rabanal, doctor en Biología y profesor ayudante doctor de la Universidad de Salamanca, focalizaba su exposición en la conectividad ecológica y las infraestructuras verdes presentes en el territorio del corredor del Duero. Poco después, Jesús Rivas Rojo, secretario de la AIMRD, explicaba en qué consiste la participación de su asociación en el proyecto. Las intervenciones han dado paso a una dinámica participativa, en la que se ha reflexionado en torno a las nuevas rutas que pueden surgir del GR 14 Camino Natural Senda del Duero y el valor añadido que puede aportarles contar con una infraestructura verde adecuada.

 

 

Un proyecto europeo necesario para la biodiversidad peninsular

Cabe recordar, finalmente, que el proyecto europeo OET (Observatorio Ecológico Transfronterizo) Durius tiene como reto salvaguardar uno de los elementos territoriales peninsulares más importantes para la biodiversidad: el Corredor del Duero. Lo logrará mediante la creación de un observatorio que sirva para analizar los distintos ecosistemas a lo largo del río, conocer qué especies existen o en qué zonas hay más biodiversidad, como afecta la intervención humana al territorio o si hay conexiones entre los distintos ecosistemas. 

Toda la información recopilada servirá para habilitar una plataforma digital de fácil acceso que permitirá la consulta, la interacción y la actualización de datos. Además, el proyecto incluye acciones de renaturalización tanto en España como en Portugal.