En la Fundación Santa María la Real llevamos más de cuatro décadas defendiendo que el patrimonio es un valor y no una carga, que debemos preservarlo como parte de nuestro legado, de nuestra memoria, pero también como elemento generador de desarrollo.
Nuestra historia se remonta al año 1977, a la rehabilitación del monasterio de Santa María la Real en la localidad palentina de Aguilar de Campoo. Con la implicación de las personas del territorio, conseguimos transformar el viejo cenobio premostratense en centro de dinamización social y cultural, demostrando así que, como decía Unamuno, “hasta una ruina puede ser una esperanza”.
Desde entonces personas, paisaje y patrimonio han sido y son las tres claves sobre las que se asientan todos y cada uno de nuestros proyectos. A lo largo de estos 40 años, fieles a nuestros principios, hemos desarrollado más de medio millar de intervenciones en bienes patrimoniales, muchos de ellos declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO, entre los más recientes, la Fachada Rica de la Universidad de Salamanca o la ciudad de Ávila. No nos hemos conformado con restaurarlos, hemos dado un paso más y hemos apostado por su conservación preventiva, por utilizar las nuevas tecnologías para conseguir que nuestros monumentos entren de lleno en el siglo XXI, en la era de la inteligencia artificial, del internet de las cosas (IoT).
Cada día, contribuimos al conocimiento y difusión del patrimonio con la publicación de libros, monografías y revistas especializadas, a los que se suman plataformas como Canal Patrimonio o Románico Digital. Hemos organizado más de 450 actividades culturales (cursos, talleres, seminarios, conciertos…), incluso hemos puesto en marcha Cultur Viajes, nuestra agencia especializada en turismo cultural y Ornamentos Arquitectónicos nuestro taller de reproducciones a escala de los principales elementos del Patrimonio.
Nada de esto, hubiese sido posible sin el apoyo de instituciones, de empresas y administraciones, sin el respaldo de nuestra red de Amigos del Patrimonio, de personas interesadas en reconstruir futuro, en generar desarrollo.
Ellos, tú, nosotros lográis que nos sobren los motivos para sumarnos al Día Internacional del Patrimonio Mundial.
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