En la Fundación estamos comprometidos y, así lo recogen nuestros estatutos, con el desarrollo sostenible de los territorios, la protección del patrimonio y el medioambiente. No se trata solo de un compromiso teórico, sino de una meta que tratamos de alcanzar a diario.

Así, en 2019 adquirimos el compromiso de reducir nuestra huella de carbono y, gracias al esfuerzo de todo el equipo y a las medidas adoptadas en los últimos años, hemos logrado registrar la huella del año 2020, equivalente a 185,7 toneladas de CO2.

¿En qué se concreta el trabajo realizado? Hay cifras muy significativas, por ejemplo, durante 2020, conseguimos reducir las emisiones derivadas del uso de vehículos en un 45% con respecto a 2019. Dato al que, sin duda, también contribuyó la situación generada por la pandemia y la creciente digitalización de muchos de nuestros proyectos e iniciativas. En los últimos tiempos, como bien sabéis, las reuniones presenciales se han reducido en beneficio de las sesiones online, con patentes beneficios para nuestro medio ambiente.

También hemos logrado minimizar las emisiones por el consumo de electricidad en un 22%. De hecho, si nuestra situación fuese la misma que en 2019, cuando adquirimos nuestro compromiso medioambiental, hubiéramos logrado reducir nuestra huella de carbono en un 29%.

Ahora bien, poco después de comprometernos, afrontamos otro gran reto, el de gestionar un nuevo centro Tercera Actividad en León, con todo lo que ello comporta. Sumar a nuestras instalaciones un edificio más implica que lograr reducir para 2023 en 57 toneladas nuestras emisiones de CO2 será reto aún más ambicioso, dado que nuestras circunstancias han cambiado. Ahora somos más y contamos con un nuevo edificio, que ha contribuido a aumentar nuestras emisiones fijas (gas propano y metano) en un  20%; sino olvidar que hay más personal que utiliza las instalaciones.

No obstante, seguiremos trabajando, con tu ayuda, para conseguirlo, ¡a por ello!